A pesar de ser la estación favorita de grandes y pequeños, el verano tiene sus “contras”: tenemos menos rendimiento durante el día (porque las noches son cálidas y por lo general dormimos poco), cuadros de deshidratación o golpes de calor y también cambios radicales en cuanto a nuestra alimentación ¿A qué nos referimos? Sencillo, a que preferimos consumir más bebidas que alimentos.
Si bien es cierto, todos somos conscientes de que comer bien es necesario para estar saludable, lo cierto es que en estos meses por lo general tendemos a descuidar lo que comemos. Por esta razón, en clínica ESVITAL queremos darte algunas recomendaciones de alimentos que debes ingerir en los meses de verano para que tu organismo no pague las consecuencias del calor. ¡Toma nota!
Frutas para mantenerte hidratado
Debido a que en verano la gran mayoría preferimos consumir alimentos frescos, nada mejor que apostar por las frutas. ¿Las mejores? Sin duda, las frutas de temporada.
Frutas como la pera, el melón, la sandía o las cerezas son alimentos con bastante agua así que, además de sus propiedades naturales, estaremos perfectamente hidratados y preparados para afrontar aquellos días intensos de calor. ¿Lo mejor de todo? Su bajo porcentaje de calorías y sus múltiples beneficios hacen que las puedas consumir en la cantidad que quieras y cuando quieras.
Ensaladas frescas
Comer un filete a la plancha quizá no te apetezca, pero ¿qué tal reinventar esa receta y preparar ese filete de salmón o pollo combinándolo con una ensalada fresca? Aunque puedes elegir lechugas y rúculas exquisitas, lo ideal es apostar también por las espinacas. ¿La razón? Su alto porcentaje de agua y de vitaminas necesarias para nuestro organismo.
Garbanzos
Dentro de las legumbres destacamos los garbanzos, aunque todas ellas nos encantan y son aptas para protagonizar platos fresquitos este verano.
Tenemos la falsa creencia de que las legumbres engordan, pero nada más allá de la realidad. De hecho, se ha demostrado que las legumbres ayudan a combatir la obesidad ya que estamos ante un alimento rico en nutrientes, con un escaso aporte graso, en torno al 3%.
Gazpacho casero y otros líquidos
Sabemos que tenemos que hidratarnos más a medida que las temperaturas aumentan… El agua (así, sin más…) puede llegar a resultarnos aburrida. ¿Cómo dar un toque de color y sabor a tus vasos de agua? Añadiendo un par de cubitos de hielo, un chorrito de limón y una hojita de hierbabuena.
Si además de este truco buscas algo más, puedes probar a hacer un gazpacho casero. Dado que no es más que verdura batida y teniendo en cuenta que se consume bien frío, en vaso y con un par de cubitos de hielo, podrás tomarlo cuando tú quieras.
Helados y yogures
¿Qué sería del verano sin helados? Los favoritos de grandes y pequeños, los helados (y sí, también los yogures) son los aliados perfectos para refrescar nuestro cuerpo y combatir las altas temperaturas. Según los expertos, tomar más de una ración al día de yogures nos ayuda a prevenir enfermedades cardíacas y de la sangre.
Un plan nutricional personalizado puede convertirse en el mayor aliado para pasar el verano. Con ayuda de un plan nutricional, serás capaz de adquirir el control de tus propios hábitos alimentarios, hacer sencillos ajustes y adaptar así tu alimentación conscientemente.