Bichectomia: Afinamiento del Rostro en ESVITAL
La bichectomia o comúnmente conocida como “extracción de las bolas de Bichat” consiste en extraer aquellos acúmulos de grasa que se sitúan en las mejillas (entre el músculo masetero y el músculo buccinador) con el objetivo de darle un aspecto más delgado y estilizado al rostro y obtener unos pómulos más definidos.
¿En qué consiste la Bichectomia?
La bichectomia es un procedimiento quirúrgico realizado de forma ambulatoria y con anestesia local, que consiste en la extracción de las bolas de Bichat.
Por lo general, las molestias durante el procedimiento son muy leves. Se realiza una pequeña incisión en cada mejilla, dentro de la cavidad oral, y se extrae el acúmulo de grasa, por lo tanto, las cicatrices son casi imperceptibles.
La duración del procedimiento es aproximadamente 40 minutos y requiere una serie de cuidados propios de una cirugía menor.
¿El paciente corre algún riesgo si se realiza la Bichectomia?
Absolutamente no. Al ser glándulas de grasa que no cumplen una función vital para nuestro organismo, pueden ser retiradas por un especialista y en las condiciones pertinentes.
¿Para quién está indicado la Bichectomia?
La Bichectomia está indicada para aquellas personas de cara redondeada, que buscan perfilar su rostro, acentuar los pómulos y afinar sus rasgos. Es válida tanto para hombres como para mujeres y puede realizarse a partir de los 18 años.
Cuidados posteriores tras realizarse una Bichectomia
Durante el postoperatorio de una Bichectomía, es imprescindible seguir las instrucciones del especialista. En términos generales, se recomienda:
- Tomar antibióticos bajo prescripción médica para desinflamar los tejidos y evitar una infección.
- Durante la primera y segunda noche se le indicará al paciente dormir con la cabeza ligeramente levantada para ayudar a prevenir hematomas y disminuir la zona inflamada.
- Aplicarse bandas frías sobre las mejillas para reducir la inflamación.
- Evitar actividades físicas intensas y exponerse al sol por un plazo de 7 a 10 días.
- El paciente deberá seguir una dieta líquida, hasta que el médico lo determine. Luego, podrá incorporar alimentos blandos de forma progresiva, hasta alcanzar la recuperación total del paciente.